Londres es una ciudad que no pasa de moda. Ese encanto clásico del Big Ben, del edificio de Selfridges, la Abadía de Westminster y la Catedral de St Paul, combinados con la magnificencia contemporánea del London Eye y 30 St Mary Axe, consolidan un skyline digno de ver y explorar por todos los ángulos. Mayfair no solo es uno de los distritos más céntricos y exclusivos de la capital inglesa, sino que además es una de las más tradicionales, situada entre Hyde Park y los jardines del Palacio de Buckingham. Justo aquí se encuentra The Beaumont, un hotel de lujo en Londres cuyo estilo Art Decó nos recuerda la época que vio nacer a Mrs Dalloway y a Roger Ackroyd.
Si The Beaumont ostenta ese estilo suntuoso tan reminiscente de la década de 1920 no es por otro motivo que el hecho de que el edificio en el que se ubica data precisamente de ese periodo. Así, más que artificio, este hotel de lujo en Londres es un recordatorio de la belleza atemporal de las construcciones típicas de la ciudad. Con 50 habitaciones y 22 suites cuya decoración se inspira en la elegancia del siglo pasado, pero con una veta de indiscutible sobriedad moderna, este hotel combina lo mejor del presente y el pasado para brindar una experiencia de primer nivel.
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The Beaumont busca emular la grandeza de los hoteles de lujo de Londres y Nueva York en la época del Gran Gatsby, pero en una escala más reducida que fomenta una atmósfera íntima y pacífica. Ese ambiente sereno es particularmente especial en un barrio como Mayfair, donde abundan los restaurantes galardonados, las boutiques y las galerías de arte, además de encontrarse a una distancia caminable de algunos de los atractivos turísticos más famosos de la capital inglesa, como Selfridges, The Royal Academy of Arts, Trafalgar Square, The National Gallery.
Por supuesto, el atractivo de The Beaumont no se limita solo a sus habitaciones. Nada mejor para consentirse después de recorrer intensivamente la ciudad como una tarde en el spa, el cual ofrece una amplia variedad de masajes y tratamientos faciales —con una gama de productos británicos de la más alta calidad— hammam, sauna y vapor para relajar el cuerpo y la mente.
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Por otro lado, las experiencias gastronómicas se mantienen a la altura de este hotel de lujo en Londres. El restaurante principal, The Colony Grill Room, ofrece una reinterpretación de la cocina clásica estadounidense, con platos como langosta fresca, chicken-pot pie y pastel red velvet. Por otro lado, Le Magritte Bar es un lugar cuya atmósfera chic y despreocupada viene de maravilla para tomar un trago y echarle un vistazo a las obras de arte que decoran sus paredes. Finalmente, Gatsby’s Room es el sitio ideal para tomar un café en la mañana, una taza de té tradicional por la tarde, o una copa de champaña en la noche.
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