Ya sea que conozcas este destino por su maravilloso (e increíblemente reparador) skincare, por sus series tan buenas que no te paras del asiento hasta que las termines o por sus cantantes impresionantemente completos como artistas; es casi imposible que no hayas escuchado sobre Corea del Sur. Hogar del delicioso tteokbokki, de templos llenos de historia y líder en tecnología a nivel mundial, la República de Corea es una nación impactante; pero en esta ocasión, hablaremos de un barrio que esconde preciosos palacios, museos llenos de cultura y que por sus pasillos pasean personas vistiendo un tradicional hanbok. Te contamos qué ver en Jongno-gu, el centro histórico (y literalmente sacado de una dinastía) de Seúl.
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Al norte del Río Han, en el corazón de la capital de Corea del Sur, se encuentra Jongno-gu, un distrito que ha sido centro de la ciudad durante 600 años desde que la Dinastía Joseon lo denominó como el sitio político y cultural más importante de Seúl. Esto se puede observar en el momento en el que llegas, ya que al pasear por sus calles uno termina en Bukchon Hanok Village, un bellísimo pueblo con estructuras tradicionales coreanas y una atmósfera de época; aquí puedes visitar una gran variedad de centros culturales, museos y participar en distintas actividades culturales, desde tomar clases de caligrafía o aprender sobre las ceremonias tradicionales de té, este lugar te ofrece una oportunidad única para sumergirte por completo en la cultura coreana.
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Pero claro, no podemos continuar sin mencionar el lugar más emblemático de Jongno-gu, el Palacio Gyeongbokgung. Esta impresionante estructura es el palacio principal de los cinco palacios de Corea del Sur y es de los lugares más visitados en este país debido a que fue la residencia principal de los reyes de la Dinastía Joseon y el lugar más importante del reino durante siglos. Su nombre proviene del Libro de Canciones de China: 君子 万年, 介 尔 景福; lo que significa “vivirá una larga vida con una gran bendición.”
Un dato curioso es que todos aquellos que estén vestidos con un Hanbok, la vestimenta tradicional coreana, entran gratis a los palacios; entonces, te recomendamos rentar aquel que más te guste, empezar tu visita temprano para evadir a las multitudes, explorar todos los rincones del palacio mientras disfrutas de la belleza y la historia intrínseca del lugar y no olvides visitar el Museo del Palacio Nacional de Corea, hogar de una impactante colección de arte y objetos relacionados a la historia de la nación.
Además del palacio mencionado anteriormente, caminando puedes encontrarte con el Palacio Changdeokgung y con el Palacio Deoksugung; así que aparta un día a cada uno para descubrir sus misterios. Después, puedes pasar a Insadong, el destino del arte y la cultura de Seúl; paseando por sus calles puedes descubrir una gran cantidad de galerías de arte, tiendas de antigüedades y de artesanías, boutiques de ropa tradicional, y excelentes lugares para comprar souvenirs. Adicionalmente, ¡es el lugar perfecto para probar la deliciosa gastronomía coreana!
Justo frente al Palacio Gyeongbokgung está la Plaza Gwanghwamun, icónica por sí sola. En el centro del lugar se alza en lo alto el Monumento al Rey Sejong el Grande, uno de los monarcas más reconocidos en la historia coreana por su atribución al desarrollo del Hangul, el alfabeto coreano. Además de utilizar este lugar como centro de celebración de eventos culturales y distintos festivales, a su alrededor se encuentran una variedad de restaurantes, cafeterías y diversas tiendas, lo que lo hace un lugar imperdible en tu próximo viaje.
Después de tanto caminar uno busca casi por instinto un lugar para descansar y relajarse, pero no teman, que Jongno-gu tiene todo. El sitio perfecto para disfrutar y respirar un poco es Cheonggyecheon, un río con más de 5 km de longitud que atraviesa el centro de Seúl y que es un espacio recreativo para todo aquel que lo visita. Con naturaleza rodeándolo y escuchando el paso del agua, puedes quedarte un rato aquí a checar todas las fotos que te tomaste a lo largo del día o reír de las anécdotas vividas con tus seres queridos.
Si eres fan de la historia y cultura coreana, de su gastronomía y estilo de vida, ya sabes cuál parte de Seúl, sí o sí, debes visitar.