Tokio es uno de los destinos más especiales en todo Japón, considerado como su capital y conocido por un carácter urbano indescriptible, así como por una fusión perfecta entre cultura, tradición, modernidad y tecnología. Si bien vale la pena recorrerlo extensamente, a sus alrededores también existen preciosas ciudades de encanto mágico, y una de ellas resguarda un bosque encantado con un museo lleno de marionetas. Sigue leyendo para descubrir más.
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A las afueras de la capital japonesa se oculta una maravillosa ciudad llena de encanto natural y belleza mágica, famosa por sus increíbles bosques encantados y parques románticos, así como por sus aguas termales donde relajarse tranquilamente y los museos ocultos dentro de la inmensidad de su territorio. Se trata de Akiruno y, además de contar con todos estos atractivos culturales, resguarda el Fukazawa Tiny Museum.
Como su nombre lo indica, Fukazawa Tiny Museum es un museo pequeñito y lleno de patrimonio cultural, ya que resguarda las obras del escultor Akimitsu Tomonaga y otros artistas similares. Al tratarse de un museo independiente, mantiene independencia e individualidad artística en cada uno de sus rincones, al igual que una atmósfera bastante íntima y de bienvenida amigable.
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Las piezas que llenan Fukazawa Tiny Museum cuentan con el estilo característico de Tomonaga, muchas de ellas esculpidas en madera natural y expuestas como marionetas en su bosque circundante. Cada uno de los salones en el museo es una forma de conocer un poco más sobre la vida del artista, lo que las hace parecer como un mundo fantástico y habitado por hongos gigantes y luminosos, hadas flotando entre los árboles, enanitos peculiares y más.
Aunado a esto, Fukazawa Tiny Museum también cuenta con una colección sorprendente de títeres de carácter legendario, al igual que un encantador cafecito de grandes ventanales hacia el jardín, un estanque lleno de peces y rodeado de vegetación natural, y una tienda de souvenirs.
