Protegida por un intrigante bosque, rodeada de montañas, a la orilla del río Darro y sobre una colina de muy difícil acceso se encuentra La Alhambra, el conjunto de arquitectura sagrada más importante dentro de un entorno militar en España. También llamado el Castillo Rojo,La Alhambra es Alcazaba –fuerte–, Alcázar –Palacio– y Pequeña Medina –ciudad–, todo el mismo tiempo. Acompáñanos a descubrir el mayor legado del Reino Nazarí de Granada, la única ciudad Palatín islámica que se ha conservado prácticamente intacta a lo largo del tiempo, y un lugar con un ambiente mágico lleno de misterios.
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Aunque su descripción pueda parecer intimidante, la popularidad de La Alhambra recae en su entorno. Si bien fue construida con la idea de ser una fortificación que aguantara cualquier guerra o desastre natural, con el paso del tiempo fue evolucionando a un magnífico palacio y centro de recreación para sus visitantes. Se dice que si La Alhambra cae es porque es el fin del mundo, ya que se considera un misterio arquitectónico cuya visita diaria alcanza las 8,000 personas, convirtiéndose en el lugar turístico más visitado de España.
A lo largo de sus paredes se pueden encontrar diversos símbolos relacionados a la cultura y época en la que se construyó La Alhambra, pero definitivamente, lo más interesante son los fragmentos y versos del Corán que se encuentran en sus paredes. Aquí encontrarás la palabra ‘eterna e increada’ de Dios de acuerdo a la religión musulmana, lo que le da un toque más intrigante al lugar, como si estuviera detenido en el tiempo. Sus columnas son de un color plateado bajo la luz de las estrella que, bajo la luz del sol, se vuelve un precioso tono dorado.
Si bien se dice que la nombraron Castillo Rojo debido a que mientras la construían en la noche resplandecía con la luz de las antorchas, esto no ha sido demostrado y sigue siendo tema de debate entre historiadores. Sin embargo, es solo es uno de los tantos misterios y leyendas que rodean este impresionante sitio.
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Bien dicen que no todo es visible para la vista humana, y La Alhambra le hace justicia al dicho. Aún cuando vale la pena visitar cada una de sus estancias –como los Palacios Nazaríes, los Jardines del Generalife, la Alcazaba, el Palacio de Carlos V, la Medina, el Partal, el Cementerio Real y el Patio de los Leones–, lo que se encuentra bajo la superficie intriga más al visitante. Bajo este recinto se encuentra un laberinto de 16 kilómetros de túneles y pasadizos subterráneos que no se sabe a dónde se dirigen ni el objetivo específico de por qué se construyeron.
Cada una de sus salas tiene su propia magia y los visitantes suelen decir que adentrarse a La Alhambra en España es cómo encontrar un lugar de paz y armonía dentro de la gran ciudad. Por la manera en la que está construida, muchos la consideran un enorme reloj solar; al igual que con un reloj de sol tradicional, donde se pueden ir siguiendo el paso de las horas del día, en Granada se puede hacer mediante sus estancias. Esto se puede observar con claridad a mediodía, cuando el lugar queda dividido a la mitad con un efecto de sombra.
