Había una vez un pueblo medieval, con casas de colores pastel, entramados de madera y ventanas llenas de flores… Así comienzan los cuentos, pero el relato de este lugar no proviene de ninguna fantasía, Eguisheim existe de verdad. Este pintoresco rincón de la región de Alsacia en Francia inspiró a los mismísimos estudios de Disney para crear la villa de Bella en La Bella y la Bestia. Si recuerdas la película, la villa tiene una hermosa arquitectura medieval, calles empedradas y bosques que la rodean, y esa misma belleza es la que encontrarás al visitar Eguisheim. Al caminar por sus calles podrías sentirte como si estuvieras dentro de un set de grabación.
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Eguisheim, un pueblo de fantasía en Francia
Eguisheim tiene una historia fascinante que se remonta a la Edad Media. Fundado en el siglo X, fue una ciudad clave durante el Imperio Romano. Aunque es pequeño, con solo unos 1,500 habitantes, el pueblo está lleno de encanto. Además de conservar en muy buen estado su arquitectura, este pueblo es especial por su estructura circular, con calles que se organizan en círculos concéntricos alrededor de una plaza central. Pero no solo es famoso por su patrimonio histórico, sino también por la calidez de sus habitantes y la calidad de los productos locales, como el vino, el pan y los quesos. Si vienes desde otras partes de Francia, Eguisheim es fácil de acceder en coche o tren desde ciudades cercanas como Estrasburgo y Mulhouse. Otro detalle interesante es que Eguisheim solía tener un castillo, residencia de la familia de los condes de Eguisheim-Dagsburg de las que aún se pueden ver vestigios de su pasado, como las murallas medievales y algunas torres repartidas por el pueblo.
Qué ver en Eguisheim
Si visitas Eguisheim, no puedes dejar de recorrer la Rue du Rempart, la calle más bonita y emblemática del pueblo. Esta vía empedrada está flanqueada por encantadoras casitas y tiendas de madera, todas decoradas con un gusto exquisito. En esta misma calle se encuentra Le Pigeonnier, –el Palomar–, uno de los rincones más fotografiados e instagrameables de Eguisheim. Al final de la Rue du Rempart llegarás a la Place du Château Saint-Léon, la plaza central más grande y pintoresca del pueblo. Su ambiente es increíble, especialmente en Navidad, cuando se monta un pequeño mercado navideño. En el centro de la plaza destaca una fuente de 1834, con una estatua de San León, el vecino más ilustre del pueblo, nacido en 1009 y que llegó a ser Papa en el siglo IX. Justo detrás de la fuente se encuentra el antiguo Castillo de los obispos de Estrasburgo. Otro lugar imprescindible en el pueblo es la Iglesia de San Pedro y San Pablo, un templo que data de los siglos XIII-XIV, que comenzó con estilo románico y terminó convirtiéndose en gótico.
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Qué hacer en Eguisheim
Eguisheim es una de las localidades más conocidas en la famosa Ruta del Vino de Alsacia, una ruta turística que recorre varios pueblos de la región, conocidos por su producción vinícola. Así que muchas bodegas en Eguisheim están abiertas al público para ofrecer catas y visitas guiadas. Aquí también se celebra cada año el Festival del Vino donde se disfruta de música, vino, gastronomía y una animada atmósfera. En Navidad, puedes subir a las Navettes de Noël, un bus turístico que recorre los pueblos de Alsacia, donde podrás comprar artesanías, productos locales y disfrutar de la magia festiva. Y, por supuesto, no puedes irte sin probar la gastronomía local, que refleja perfectamente la cocina típica de Alsacia. Entre los platos más destacados están el choucroute, un guiso de chucrut con carnes y salchichas, el baeckeoffe, un guiso de carne, papas y verduras, y los flammekueche, una especie de pizza finita cubierta con cebolla, bacon y crema. Como verás Eguisheim tiene todo lo que esperarías de un pueblo de cuento, pero lo mejor es que su encanto es 100% real.
¡Un pueblo de cuento hecho realidad!